¿Se debe recurrir o no al arbitraje?
¿Conviene someter los casos al arbitraje? A veces, nos vemos obligados a hacerlo, pero el someter quejas al arbitraje puede resultar caro y peligroso. ¿Por qué? Porque el arbitraje implica la intervención de una tercera parte, lo cual contribuye muy poco o nada al fortalecimiento del sindicato, y en el peor de los casos, puede sentar un mal precedente que los trabajadores de nuestra unión y otros pagarán caro por muchos años.